Conocemos a Hernán Cortés como conquistador de los mexicas por la campaña que realizó entre 1519 y 1521 contra Tenochtitlán. Pero olvidamos que el objetivo inicial de las expediciones españolas era llegar a Asia. Cortés también participaba de ese proyecto y desde 1522 intentó explorar las aguas de la Mar del Sur, como se le llamaba al Océano Pacífico.
En 1527, Cortés lanzó su primera exploración marítima del Pacífico. Su primo Alvaro de Saavedra Cerón fue el responsable de esta expedición de 3 navíos. Zarparon de Zihuatanejo, cerca de Acapulco. En 1529, al intentar regresar a la Nueva España, Saavedra perdió la vida.
En 1532, una nueva expedición de 2 navíos zarpó de Acapulco con el objetivo de explorar el norte del océano. Cortés confió esta tarea a Diego Hurtado de Mendoza. Un barco se perdió y el otro cayó en manos de Nuño de Guzmán, enemigo político de Cortés.
En 1533, desde el puerto de Santiago, actual Manzanillo, se echó a la mar una nueva expedición marítima de 2 barcos. En esta ocasión Cortés puso el mando en Diego Becerra, quien fue asesinado durante el viaje. Los amotinados llegaron hasta Baja California, que pensaron que era una isla.
En 1535, Cortés lanzó una campaña de exploración y poblamiento de Baja California, donde pensaba fundar una gobernación para que le sirviera de punto de partida de nuevas expediciones. Descubrieron que se trataba de una península y, al enterarse de las condiciones desérticas del lugar, la tierra fue abandonada.
En 1539, durante el mes de julio salió de Acapulco la última expedición marítima de Cortés. Francisco de Ulloa era su capitán y llegó hasta la isla de Cedros, desde donde decidió dar vuelta por los vientos contrarios.
Hernán Cortés tuvo que viajar a España por asuntos políticos y ya no volvió a América porque murió en 1547, cerca de Sevilla.
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