Reseña de la novela "Las cartas que nos tocan"

Ramón Gallart, autor de la novela, aborda varios temas en su libro: el amor, la amistad, la honestidad, la lealtad, la fidelidad… pero por encima de todo, aborda el tema del destino y del albedrío humano. En efecto, a partir del momento en que las personas tenemos conciencia de nuestra situación y contexto, pero sobre todo de la capacidad para transformar nuestras vidas, todo es posible. A partir de ese momento podemos tomar las decisiones más importantes para nuestra vida. El título de la novela hace alusión a una partida de cartas en la que podemos distinguir dos momentos: primero, ser conscientes de las cartas que nos tocan y, segundo, saber que poseemos el poder de jugarlas con libertad, según nuestros objetivos de vida, incluso si va contra las tradiciones y la moral social. Esta expresión, “las cartas que nos tocan”, procede de una misiva escrita por Hugo, el protagonista de la novela.

La historia

La historia se articula en torno al personaje principal, Hugo, quien es también el narrador. Un hombre joven, de familia modesta, originario de Barcelona, y que trabaja en una clínica psiquiátrica y de recuperación de adicciones. Es un buen hombre que trata de ayudar a todo mundo, sobre todo a su amigo de infancia, Manolo, quien se mete siempre en problemas por su carácter y personalidad arriesgada e insensata. En efecto, Manolo destruye su matrimonio con Patricia por sus constantes infidelidades, pero Hugo siempre está ahí, aconsejándole, echándole la mano en lo que puede. Hugo también trata de ayudar a su hermana, Maite, quien sufre de la enfermedad de fatiga crónica. Trata de ayudar a Sonia, una paciente en proceso de desintoxicación de alcohol que conoce en la clínica. Trata de ayudar a Ramiro, un conocido de un trabajo anterior, a pesar de que lo traiciona y casi le cuesta la vida. Trata de ayudar al doctor psiquiatra de la clínica, de quien se convierte en chofer. Finalmente, trata de ayudar a Cris, de quien se obsesiona. Como digo, es un buen hombre que trata de hacer el bien a su alrededor, en su universo de vida: familia, amigos, trabajo.

Pero la historia principal de esta novela es la obsesión que tiene Hugo por Cris, desde la primera vez que la conoció en una noche de copas. Terminan en la playa, se besan, pero cuando Hugo la quiere llevar a la cama ella lo rechaza, aunque le promete que lo hará al día siguiente, pero al día siguiente Cris desaparece. Entonces comienza una búsqueda incansable de Hugo por encontrar a Cris, que parece una obsesión. Utiliza todos sus recursos para lograr dar con ella: los buenos oficios de un tío que trabaja en la policía, las intermediaciones de una prima, las confidencias de la madre de Cris. A veces la encuentra, pero esos encuentros son efímeros porque Cris siempre se escapa, nuevamente sin dejar rastro, se esfuma. La obsesión de Hugo, en realidad, es la de descubrir la razón por la que Cris lo rechaza al mismo tiempo que le manda señales que indican que lo quiere.

Recursos literarios

La novela está escrita en primera persona. Hugo es el personaje principal y es al mismo tiempo el narrador, como ya lo dije. En ese sentido, el principal reto creativo ha sido la construcción del personaje, pues esta construcción debe pasar, primero, por su lenguaje y su identidad al expresarse. Este importante desafío fue solventado con mucha maestría por el autor. Su narración, que es la narración de Hugo, va muy bien con la estructura de la novela. La voz de Hugo es la voz de la novela, y esta voz es la de una persona modesta de Barcelona, con modismos propios de esa ciudad, con términos llanos, sin pretensiones, con palabras y expresiones ordinarias.Sin embargo, esta característica no impide que la voz sea rica y abundante en palabras. La construcción del relato hasta podría interpretarse como si fuera la de un diario, pero no, es una narración literaria con todas las credenciales de un gran novelista. 

La novela no está estructurada en capítulos, ni en apartados, únicamente en párrafos, uno detrás de otro hasta el final de las 250 páginas. Otra vez, me parece que este rasgo describe la identidad del personaje principal y narrador, y constituye una genialidad. No hay comillas ni guiones de diálogos, todo está organizado con los recursos propios del párrafo: comas, puntos y comas, puntos. Me recordó un poco la novela de José Saramago, Ensayo sobre la ceguera. Tal vez esta cualidad es lo que hace que la lectura sea ligera, ágil, amena, dramática y divertida. Es una escritura hecha con mucha creatividad, dinamismo y gran calidad. 

Conclusión

Se trata de una novela perfectamente elaborada según los cánones de las mejores novelas, con un ritmo ágil, con una fina construcción de la trama que va llevando al lector poco a poco al nudo y al desenlace final. Hay que aplaudir que el autor cierra y resuelve todas las historias que abre a lo largo de la narración; es decir que resuelve la historia de Manolo y Patricia, la de Maite, la de Sonia, entre otras, sin dejar cabos sueltos. Una novela sorprendente, con una trama fuerte y giros imprevisibles. ✓